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Ayer, día 12 de diciembre, finalizó la COP 28 celebrada en Emiratos Árabes con el lemaUnir. Actuar. Cumplir”. Esta cumbre ha reunido a los casi 200 países que forman parte de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Y el punto de mira de este encuentro se ha centrado en los combustibles fósiles y en el llamamiento de poner fin a esta forma de producción de energía.

Los grandes objetivos de la COP28 han sido cuatro: acelerar la transición energética y reducir las emisiones para 2030, financiar la acción climática, situar en el centro de la acción climática a la naturaleza, personas, vidas y medios de vida y organizar una COP más inclusiva

Pero como ya hemos comentado, el objetivo principal era conseguir avanzar en la descarbonización de la economía con una adaptación y mitigación justa para todos los países. Este ha sido el tema polémico puesto que no se ha llegado a un compromiso de eliminación total del uso de los combustibles fósiles.

Sí se ha logrado el compromiso, una vez más, de acelerar la transición energética de una manera ordenada, justa y equitativa, reduciendo la demanda y oferta de combustibles fósiles y potenciando la inversión en energías renovables y eficiencia energética como medidas para alcanzar el cero neto en emisiones.

Y como ya hemos comentado en otros artículos, existen organismos internaciones y nacionales de normalización (como ISO) que persiguen establecer criterios comunes y unificar esfuerzos para lograr las cero emisiones, bajo unas normas basadas en el consenso.

Pues bien, en la Cumbre anterior, la Organización Internacional de Normalización, ISO, cuyo miembro español es la Asociación Española de Normalización, UNE, publicó el  estándar Net Zero Guidelines (Directrices para el cero neto), cuya descarga es gratuita. Esta norma es una herramienta para los responsables políticos y todos los que trabajan para lograr cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para su empresa, grupo o país. Estas directrices establecen un marco común que permita alcanzar a las organizaciones el objetivo de cero emisiones.

¿En qué consiste la norma UNE-ISO IWA 42?  

El estándar se elaboró con una amplia participación internacional, más de 1.200 organizaciones y personas de más de 100 países, incluyendo la contribución de entidades españolas. Contó, además, con la coordinación de UNE para su traducción al español como UNE-ISO IWA 42, permitiendo así ampliar su difusión. Este documento es accesible gratuitamente, de forma totalmente excepcional, a través de la web de UNE.

Proporciona directrices para que las organizaciones realicen la transición hacia el cero neto de forma coherente y eficaz. Establece definiciones clave, como el propio término de cero netos, que pone el foco en priorizar la reducción de emisiones aplicando medidas de eliminación de gases de la atmósfera solo sobre las emisiones residuales. Además, considera todas las emisiones de efecto invernadero en la cadena de valor de la organización, tanto directas como indirectas. El estándar contiene pautas tanto para las organizaciones que se proponen llegar al cero neto como para las organizaciones que dictan políticas, legislación, acuerdos o marcos con este objetivo.

Imagen: freepick